De jugador a entrenador, incluso profesor de Universidad en Galicia, José Manuel Martínez Paz “Secho” es el actual seleccionador gallego sub-18. Durante ocho años fue técnico de las categorías inferiores del Real Club Deportivo de La Coruña. Conoce bien el funcionamiento del fútbol base y de la importancia que tiene para llegar al profesional. IDE ha tenido la oportunidad de escuchar su visión futbolística.
Pregunta: ¿Cómo de importante crees que son los fundamentos básicos de cada posición?
Respuesta: Más que en cada posición yo creo mucho en lo que son los fundamentos digamos universales del juego. En primer lugar, interpretar el juego significa conocer e interpretar todas las señales que tienen que ver con la lógica interna del juego en primer momento, como son los elementos jugador, espacios, balón, porterías… Luego, vas creciendo en el grado de especificidad, como pueden ser la formación de un equipo, los recorridos defensivos, la distancia que se la a un oponente cercano o no… Todo ello, con o sin balón, los fundamentos son vitales para, por ejemplo, con balón ir generando ventajas continuas. Yo soy un enamorado sin balón, del juego entre posiciones, de oscurecer al rival para que no pueda ver al jugador y al balón al mismo tiempo, salirse de la espalda, recibir un poco con alejada, esconder el pase, todos esos son fundamentos que creo ayudan a la esencia de este juego, que al final es el engaño y sorprender a un adversario.
P: ¿Qué detalles fundamentales definen estas situaciones micro según tu visión?
R: Para mí, al final llegado a contextos de máxima igualdad estos pequeños detalles marcan la diferencia en si la jugada se convierte en eficaz o no. Al final se trata de llegar a posicionar a jugadores ganando posición de gol con ventaja, ya que así las probabilidades para ser eficaz de cara a portería aumentan. No me quedo nunca solo con si hemos llegado muchas veces sino la calidad de la llegada y los pequeños matices que puedan hacer que seas más productivo y te acerquen a la victoria.
P: ¿Qué parámetros utilizas para la evaluación de un futbolista?
R: Voy primero a la esencia del jugador, lo que marca la diferencia. Es decir, que dos o tres cosas tiene. Por ejemplo, si es un jugador entre líneas, que recibe, que gira, que conduce y atrae jugadores, que le hacen muchas faltas cercanas al área, cuanto participa, cómo lo encontramos… primero voy ahí. En este caso, un jugador desequilibrante, evidentemente hay unos factores como puede ser el número de asistencias, de situaciones ventajosas que genera el jugador o inclusive el número de penetraciones de cara a hacer gol. Digamos, cada jugador y cada posición o por dónde se mueva, áreas de influencia, tendrían sus propios criterios, unos generales como decimos: qué hago cuando tengo la pelota, cuando no la tengo, le observamos si está cerca o lejos del balón… pero para mí lo esencial o básico son estas dos o tres cosas en las que marca la diferencia cada jugador.
P: ¿Cómo de útil consideras que los jugadores escondan la intención? ¿Cómo lo trabajas?
R: Primero jugando, hablando con ellos, viendo vídeos y observando otros jugadores para ver como lo hacen. Luego, en distintas situaciones más o menos específicas, por ejemplo, en una posición más o menos direccionada el tema de no solapar líneas de pase, dejarla pasar, si el rival está cerca, amagar, jugar cera para jugar lejos, esperar y coger contrapié… En cualquier ejercicio, detalle, vamos poniendo situaciones viendo vídeos y vamos diseñando situaciones de entrenamiento en las que creemos que eso va a aparecer con más o menos frecuencia.
P: ¿Qué otros aspectos consideras imprescindibles en la evolución profesional de un jugador?
R: Muchos, pero primero es el compromiso, las ganas de querer serlo, el respeto a ese esfuerzo que va a tener que hacer. Primero lo llevaría todo lo que es el comportamiento, la disciplina, los hábitos, todo lo que tiene que ver con eso me parece fundamental. Es cierto que hay jugadores que tienen un talento natural muy alto y que sin esos aspectos son capaces de llegar. A partir de ahí, el querer aprender cada día eso es fundamental y saber convivir en un ecosistema como es un equipo de fútbol. Aunque repito, cada día, en cada entreno y partido la predisposición máxima para aprender y mejorar dentro de lo que es un deporte de equipo. Nadie en un deporte de equipo creo que mejora solo, hay ciertos aspectos que sí, pero la esencia es mejorar dentro del contexto-escenario –el equipo– que te toque.